Wednesday, January 31, 2007

Cuando tenemos "uno de esos días"

Eufemismo donde los haya, desde luego, y todo por evitar la incómoda (?) expresión síndrome premenstrual. Apareció ayer en El País un artículo con el sugerente (?) titular "Cuando ella tiene uno de esos días" acerca de las últimas investigaciones sobre los procesos que desencadenaban el SPM o... SÍN-DRO-ME PRE-MENS-TRUAL (llamémoslo por su nombre). Han llegado a la conclusión de que durante la primera mitad del ciclo, las glándulas producen más estrógenos (las chicas nos volvemos más femeninas, nos entran unas ganas irrefrenables de cocinar galletas y tal), mientras que en la segunda mitad domina la progesterona (y entonces nos volvemos masculinas, y cogemos un machete para reducir las galletas a migajas... Y perdemos después en la espesura machete en mano). El artículo desarrolla otras cuestiones (consultadlo en http://www.elpais.com/articulo/sociedad/tiene/dias/elpepusoc/20070130elpepisoc_11/Tes).

Si yo suelto la lagrimilla con mucha más facilidad durante el SPM, ¿significa que la máxima es errónea y los chicos sí que lloran (y mucho, y por cuestiones insignificantes como "ese" anuncio)?

Si los resultados del estudio no andan muy desencaminados, ¿entonces los chicos os sentís así tooooodo el tiempo? (¡Qué pobres!)

Las hormonas nos controlan, el amor proviene de una reacción química y no somos más que el vehículo que nuestros genes emplean para reproducirse. Pensamiento deprimente. Me bajo por chocolate (será el SPM, o que mi cuerpo me lo exige para compensar el bajón emocional).

Wednesday, January 17, 2007

Sin palabras

En cinco minutos:
Lugar: mi habitación
Hora: las seis de la tarde (aprox.)
Vestuario: el pijama de franel... Digo, pantalón, camiseta y la bata por encima (hacía frío).
Actividad: leía un documento PDF en el portátil
Suceso: cruzo los brazos, extiendo las manos. De repente me noto un bultito.
Proceso mental: Me aseguro. Sí, es duro. No, no se mueve. Ohdiosohdiosohdios. ¿La cantante de Chambao no tuvo un cáncer de mama a los veintiocho años? Ganas inmensas de llorar. ¿Qué hago, llamo a mi madre, se lo oculto para que no sufra y me las arreglo para pedir hora a un oncólogo o ginecólogo? La angustia me cierra la boca del estómago, se me sube el corazón a la boca, me cuesta tragar saliva, etc.
Me armo de valor, me levanto y voy al baño.
Para descubrir que era una j*****a tachuela de la camiseta.
Gracias a lo que sea por estar viva y sana. Voy a quemar la camiseta en cuanto vuelva a casa.

Monday, January 15, 2007

Elephant, by Gus Van Sant

Mi guilty pleasure este sábado (dado que me he pasado el fin de semana encerrada, dándole los últimos toques a las 25 páginas de mi tesina - penoso). Estrenada en 2003, se trata de una dramatización (¿o ficcionalización?) de los sucesos de Columbine que Michael Moore se había encargado de analizar un año antes en su controvertido documental sobre la pasión -insana- que los ciudadanos de los EEUU sienten por las armas de fuego. Estilo europeo, minimalista, muy poético, ritmo lento pero en ningún momento pesado, movimientos de cámara sorprendentes y planos que se escapan de lo convencional; hay escenas que en el MUSAC pasarían por instalaciones de vídeo. Se eligió a los actores entre estudiantes de instituto (se presentaron al casting unos tres mil) y se mueven frente a la cámara con una naturalidad pasmosa, aunque más de uno no puede evitar mirarla con descaro. ¿Pegas? Fueron los propios actores los encargados de escribir los diálogos, lo que lleva a tener que soportar memeces del tipo: "Pasas demasiado tiempo con tu novio. Yo soy tu mejor amiga desde hace ¡¡Tres años!! (tía)" "Tengo que distribuir el tiempo. ¿O pretendes que pase el 95% contigo y el 5% con él? (o sea)" "No subiré a ese coche contigo, soy demasiado joven para morir (¿qué se puede decir? Brillante)" Y mi favorita: "¿Crees que todavía se pueden comprar banderas nazis?".
8/10

Thursday, January 11, 2007

Espesa

Como a L. le gustan las lentejas. Consulto el Simon&Schuster's que le birlo por horas a I. y encuentro la siguiente traducción de density: "estupidez o torpeza mental"; no especifican si se trata de una torpeza pasajera o permanente (y yo rezo por que la mía desaparezca en unos días). Aunque me llama la atención la coincidencia del significado de ambas expresiones, esa idea al parecer común al inglés y al español de que los pensamientos han de fluir veloces como una corriente de agua, prefiero los rasgos que distinguen a una lengua del conjunto. Por ejemplo, ¿qué sugiere la expresión: It makes me feel as if a goose were walking on my grave (Me hace sentir como si un ganso caminase sobre mi tumba)? Parece que queda en suspenso la concepción lineal del tiempo, ¿verdad?. A mí no se me ocurre ninguna equivalencia en español, a no ser "Estáis clavando otra punta en mi ataúd" o similares, y no pondría la mano en el fuego (puede tratarse de una traducción literal del inglés que ha encontrado acomodo en español). De hecho, ningún profesional traduciría "Me hace sentir como si un ganso...", sino "Me da escalofríos", ni "Estáis clavando otra punta..." si tiene el recurso castizo "Me matáis a disgustos".
Mmmm... Y esta ha sido mi pausa intelectual/lingüística de las doce y media.
Voy a añadir uno más a mi lista de propósitos razonables para el 2007: Dejar de escuchar las noticias por la mañana (se me va a quedar cara de político en la oposición).
Mi caballo bien, gracias, por si alguna/o se lo estaba preguntando. Lo he dejado atado a la chumbera.

Friday, January 05, 2007

The End

Tiró de la sábana y la mujer se incorporó, chillando y sacudiéndose como poseída. Pero la niña era fuerte y aún tenía el cuchillo de su padre; logró sujetar a su abuela lo suficiente para averiguar la causa de su enfermedad. Había un muñón sangriento y que mostraba los primeros síntomas de la gangrena allá donde su mano derecha hubiera debido estar.
La niña se santiguó y gritó tan fuerte que los vecinos la oyeron y acudieron a toda prisa. Reconocieron la verruga como el pezón de una bruja; arrastraron a la anciana en camisón fuera de la casa, sobre la nieve golpearon sus viejos huesos con palos hasta el límite del bosque y la lapidaron hasta que murió.
La niña vive ahora en la casa de su abuela: ha prosperado.

Tuesday, January 02, 2007

LRRH meets the Wolf

Era enorme, con los ojos rojos y las grisáceas costillas visibles bajo la piel; cualquiera, esto es, cualquiera excepto la hija de un lugareño, se habría muerto de miedo. Se tiró a por la garganta, como hacen los lobos, pero ella lo rechazó con el cuchillo de su padre y le rebanó la pata delantera derecha.
El lobo dejó escapar un gruñido que sonó como un quejido cuando comprobó lo que le había ocurrido: los lobos son en realidad más cobardes de lo que parecen. Se alejó cojeando a tres patas, dejando un rastro sanguinoliento entre los árboles. La niña limpió la hoja del cuchillo en su mandil, envolvió la pata del lobo en el trapo con que su madre había hecho un paquetito con los pasteles de avena y retomó el camino hacia la casa de su abuela. Empezó a nevar de pronto, con tal intensidad que cualquier huella o rastro, y hasta el camino en sí, dejaron de ser visibles.
El estado de su abuela, tan enferma que se había metido en la cama y había caído en un sueño irregular, salpicado de quejidos y tiriteras, le llevó a pensar que era víctima de unas fiebres. Le puso la mano en la frente. Ardía. Se le ocurrió mojar el trapo que envolvía la pata para refrescar a la anciana, y al sacudirlo la pata cayó al suelo.
Pero ya no era una pata de lobo. Era una mano humana, cortada a la altura de la muñeca, una mano encallecida por el trabajo a la intemperie y sombreada por las pecas de la edad. Tenía un anillo en el anular y una verruga en el índice. Por la verruga supo que se trataba de la mano de su abuela.

No quiero herir (más) sensibilidades "en fechas tan señaladas". Dejo el resto para otra ocasión. Por cierto, ¿vosotros creéis en la memoria atávica? No creo que exista este concepto como tal, de modo que me explicaré. ¿Creéis que existe un conjunto de datos que almacenamos en la memoria como especie, ciertos conocimientos que no aprendemos sino que "vienen de serie", por decirlo así? Generativismo aparte (que os veo venir a las lingüistas), recuerdo una anécdota que me contaba mi abuela. Cuando ella tenía seis o siete años, mi bisabuelo la dejó cuidando un pequeño rebaño de ovejas en el monte. Mi abuela se distrajo un momento (¿un pájaro, una mariposa, una flor? ¿Qué te distrae cuando cargas con una responsabilidad de adulto a los seis años?) y cuando se volvió, un lobo ("el" lobo, como ella dice) se estaba llevando un corderito entre las fauces. A mi abuela se le ocurrió tirarle unas piedras, que al animal le rebotaban en los costados. Acabó llevándose al cordero, para desconsuelo de mi abuela. ¿Me vendrá de ahí la preferencia por Caperucita? ¿Me lo contó tal vez cuando tenía cuatro o cinco años y se me fijó como una lapa al subconsciente?
Anécdota b): tengo tres o cuatro años. Lo sé porque alguien, creo que mi madre, me está ayudando a bajar las escaleras. Me agarro con fuerza a su mano. Ya ha anochecido, la luz del pasillo está encendida. Llegamos al rellano de nuestro piso. Entonces la veo y juraría que ella me mira a mí, fijamente, con unos ojillos negros, brillantes e inteligentes. Es una rata enorme, la primera que veo en mi vida. Abro la boca y empiezo a gritar. Fundido en negro.
¿Por qué me asusté si nunca antes había visto una rata? ¿Un recuerdo transmitido de generación en generación, una advertencia sobre sus dolorosos mordiscos y las enfermedades que podían transmitir en una época en que por cada niño que nacía morían tres?